Carlo Ancelotti asume oficialmente el mando de Brasil y recibe la mítica ’10’ como símbolo de confianza

Carlo Ancelotti, uno de los entrenadores más laureados en la historia del fútbol, inició una nueva etapa en su carrera al asumir formalmente la dirección técnica de la Selección de Brasil. Su llegada al país sudamericano fue recibida con expectación mediática, simbolismo futbolístico y un claro mensaje de confianza por parte de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), que le entregó la icónica camiseta número 10 de la ‘Canarinha’, asociada a leyendas como Pelé, Zico y Ronaldinho.

Ancelotti aterrizó en Río de Janeiro en medio de un ambiente de entusiasmo y compromiso. En el acto de presentación, el presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, destacó el perfil del técnico italiano como el ideal para devolver a Brasil su lugar protagónico en el fútbol mundial. “Hoy entregamos no solo una camiseta, sino una responsabilidad histórica. Confiamos en que Ancelotti sabrá liderar esta generación hacia la grandeza”, declaró el dirigente.

Durante su intervención, Ancelotti no ocultó su emoción: “Para cualquier entrenador, dirigir a Brasil es una cima profesional. Sé lo que representa esta selección en la historia del fútbol. Es un honor y también un desafío que asumo con total compromiso”.

El debut oficial del entrenador está programado para el 5 de junio, cuando Brasil enfrente a Ecuador en Guayaquil por las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2026. Cinco días después, el equipo se medirá con Paraguay en São Paulo. Estos encuentros marcarán el inicio de un ciclo donde la expectativa es tan alta como las exigencias.

En su primera convocatoria, Ancelotti sorprendió al dejar fuera a Neymar y Rodrygo, una decisión que causó revuelo en la prensa brasileña. Sin embargo, el técnico explicó que se trató de una combinación entre decisiones técnicas, estado físico y planificación a largo plazo. “Hablé personalmente con Neymar. Este es solo el comienzo de un proceso. Todos los grandes jugadores tienen puertas abiertas”, aclaró.

El italiano apostó por una mezcla de experiencia y juventud. Volvió a convocar a referentes como Casemiro y apostó por nuevos talentos como Estêvão, la joven promesa del Palmeiras que viene deslumbrando en el campeonato local. Ancelotti busca armar un grupo equilibrado, con dinámica europea pero alma brasileña.

La llegada del técnico marca un hito: es el primer extranjero en casi 60 años que asume el mando de la selección brasileña. Su contratación ha sido interpretada como una señal de cambio en la estrategia de la CBF, que busca combinar la tradición del jogo bonito con la mentalidad táctica y competitiva que ha caracterizado al fútbol europeo en los últimos años.

Aunque su hijo y asistente habitual, Davide Ancelotti, no formará parte del cuerpo técnico de forma permanente debido a otros compromisos, se espera que colabore en los primeros partidos del proceso clasificatorio.

Con cuatro títulos de Champions League como entrenador y conquistas en las principales ligas del continente, Ancelotti enfrenta ahora uno de los mayores retos de su carrera: liderar a Brasil en el camino hacia su sexto título mundial. El desafío es enorme, pero también lo es su experiencia. La ilusión ya comenzó a rodar.